PREMIER PADEL

Una sonrisa perenne delata la liberación de Galán tras su ruptura con Lebrón

Ale Galán y Fede Chingotto se estrenaron con victoria en el P2 de Puerto Cabello.

Ale Galán y Fede Chingotto tras la victoria en Venezuela./PREMIER PADEL
Ale Galán y Fede Chingotto tras la victoria en Venezuela. PREMIER PADEL
Álvar Madrid

Álvar Madrid

Con una sonrisa en la cara y vestidos de color verde esperanza, Ale Galán y Fede Chingotto arrancaron anoche en Puerto Cabello su nueva aventura profesional. No era un partido de campanillas para ver realmente el nivel deportivo que puede llegar a alcanzar la pareja, pero la prueba sí que sirvió para otra cosa no menos importante. El lenguaje gestual de ambos jugadores durante todo el encuentro puso de manifiesto la buena sintonía desprende el proyecto 'chingalán'.

En frente tuvieron a Javier Valdés y Rafa Méndez, dos jugadores que a priori no deberían poner en apuros a ninguna pareja del top 10. Los pronósticos se cumplieron a rajatabla. Galán y Chingotto liberaron toda la presión que supone arrancar un proyecto deportivo pasando por encima de sus oponentes en dos sets 6-3 y 6-0. En todo momento fueron superiores a sus rivales que no les pusieron en apuros en ninguna ocasión durante todo el partido.

Si tuviéramos que sacar algunas conclusiones tras lo visto anoche, podríamos poner de manifiesto tres diferentes con mucha facilidad. La primera es que Galán se ha liberado tras su ruptura con Lebrón. El jugador madrileño estuvo muy cómodo y durante todo el partido le vimos sonreír, algo que no ocurría en su última etapa junto al Lobo. La segunda es que va a tener que asumir mucho más protagonismo a nivel ofensivo. Los rivales castigarán a Chingotto con globos que Ale deberá aprender a neutralizar. Y la tercera es que tendrá que aprender a lidiar con las neveras que le practiquen sus rivales.

Por su parte, Chingotto sigue siendo el muro que nos tenía acostumbrado. Un portento físico que barre de pista de lado a lado, seguro en la red y fiable en todos los aspectos del juego. La faceta ofensiva sigue siendo el punto en el que la pareja debe trabajar, algo que, según hemos podido conocer en Relevo, se está haciendo hincapié por parte de su cuerpo técnico.

De Galán podemos asegurar estuvo cómodo, le vimos tirar varios molinillos, su filigrana marca de la casa con la que deja boquiabiertos a los aficionados. Otra acción de juego que comenzamos a ver anoche y que será habitual en el trascurso de la vida deportiva de la pareja es que, en ocasiones, el jugador madrileño invada el lado de la pista del argentino cuando llegue algún globo que sea susceptible de rematar. Los rivales saben que por ahí pueden hacer daño a la pareja y Galán tendrá que estar muy pendiente de ello para intentar contrarrestarlo con su pegada.

La siguiente prueba de fuego para la pareja hispano-argentina tendrá lugar esta noche. En octavos de final se van a ver las caras ante Enrique Goenaga y Teo Zapata, otra pareja de la parte media del ranking con los que a priori no deberían tener problemas Galán y Chingotto. El objetivo sigue siendo el mismo: rodarse, adaptarse a la forma de jugar el uno del otro e ir sumando minutos en pista que hagan que la pareja se vaya conexionando.

Del estreno de Juan Lebrón y Momo González se pueden sacar menos conclusiones, debido a que se trata de una pareja temporal solo para este torneo, hasta que el Lobo arranque su andadura junto a su compatriota Paquito Navarro. Recordamos que Momo y Juan ganaron en su debut a Marc Quílez y Toni Bueno con un ajustado 7-5 y 6-4 en casi hora y media de juego.