Un español roza la gloria en el mítico Rally de Montecarlo: Pepe López, a sólo cuatro segundos de ganar el WRC2
El pentacampeón de España se abre paso en el Mundial cuajando un debut espectacular con un Skoda privado.

Hace dos jueves, en Murcia, con Pedro de la Rosa como maestro de ceremonias, un ilusionista hizo que su coche apareciera de la nada, en mitad del escenario donde se celebró la fastuosa presentación de Terra Training Motorsport, uno de los equipos de rallies más pujantes de nuestro país. Este fin de semana, él también ha hecho magia al volante, pero sin trucos. Pepe López ha cuajado una carrera para enmarcar en el rally por antonomasia, el de mayor relumbrón del calendario internacional: el mítico Montecarlo. Ha sido sin duda alguna la actuación más despampanante hasta ahora en la azarosa carrera del madrileño, que con 28 años cumplidos, y cinco títulos nacionales en su palmarés, ha empezado ya sí a abrirse paso en el Mundial, desde los albores de una temporada que se perfila como una reválida para él, a la hora de intentar hacerse un nombre entre los pilotos referenciales de la especialidad donde sus padres competían juntos de jóvenes.
Habituado ya a estas alturas a que su carrera dé tantos vaivenes como curvas tiene un tramo, Pepe López se ha encontrado cuando menos lo esperaba con la oportunidad de encarar por primera vez un programa a tiempo completo en la categoría de plata del Mundial, el escaparate ideal para cualquier piloto que pretenda entrar en las quinielas de una escuadra oficial. Los nórdicos y franceses que abundan últimamente suelen promocionar al WRC2 a poco que acreditan algún mérito corriendo en casa; al madrileño, sin embargo, le ha resultado bastante más tortuoso el camino para llegar al punto culminante donde ahora por fin está.
Ganó cuatro títulos de una tacada con Citroën España, reivindicándose como la nueva estrella del Nacional; pero irrumpió la pandemia y le truncó toda posibilidad de enraizar con la casa madre. Teo Martín, su padrino deportivo en el Mundial de 2021, selló entonces un acuerdo para que Pepe fuera piloto de Hyundai al año siguiente; pero el jefe del equipo fue destituido al poco tiempo, y aquella operación, que se presumía decisiva para el futuro de Pepe, se convirtió en papel mojado.
Despite the result, it was an epic run by Pepe López all weekend 👏 pic.twitter.com/IJUJHyTpXW
— World Rally Championship (@OfficialWRC) January 28, 2024
Por si fuera poco, a principios del curso pasado, cuando venía de lograr un sugerente podio en Montecarlo (tercero) con el equipo de casa, el madrileño se quedó sin puntos en el carné de conducir y tuvo que estar varios meses sin correr; más de los que él mismo había contemplado, una vez recuperada su licencia.
Fue entonces cuando le apareció la opción de unirse a Terra Training Motorsport, que confió ciegamente en él y lo devolvió en seguida a la competición, con la promesa de encomendarle el doble programa –WRC2 como privado y Supercampeonato de España corriendo para la filial de Hyundai– que el piloto de Hortaleza acaba de estrenar con honores este fin de semana.
Un debut para soñar
Investido ya jefe de filas del conjunto murciano, Pepe López se encontró en Navidad ante un folio en blanco con vistas al Montecarlo: nuevo equipo, nuevo preparador (MAPO Motorsport, la estructura del ex piloto mundialista Xevi Pons), nuevo copiloto (David Vázquez)… Y nuevo coche para el proyecto del Mundial: un Skoda Fabia RS Rally2 como el que coronó en España el curso pasado su némesis, José Antonio Suárez. Un modelo de última generación, con el que el madrileño ha experimentado instantáneamente una simbiosis fabulosa; tres días de tests (el primero en Cataluña, después de Nochebuena, y los dos siguientes a la vuelta de vacaciones, en el corazón de los Altos Alpes), le bastaron para acoplarse al Fabia y a su nuevo copiloto, y salir a por todas al 'Monte', catedralicio de su admirado Ogier.
Sólo él en su fuero interno, Pepe se sabía capaz de ejecutar un comienzo de rally como el que se marcó el jueves –después de partir desde la Plaza del Casino de Mónaco–, tan deslumbrante como las bengalas rojizas que envolvieron en una atmósfera ensoñadora, de cabalgata de Reyes, las horquillas del tramo de Bayons. El español dejó su sello a las primeras de cambio, yéndose a dormir líder con dos rotundos scratch. Ese fue el preludio de una lucha titánica por la victoria, en la que el nuevo gran exponente de Terra Training Motorsport se ha destapado (corriendo con un equipo privado) como el único piloto capaz de plantar cara a los titulares de Citroën: Yohan Rossel y Nikolay Gryazin, dos de los contendientes más avezados del WRC2.
El pulso entre los tres ha resultado aún más vibrante que el que han librado al mismo tiempo Elfyn Evans, Sébastien Ogier y Thierry Neuville por el triunfo de la clase reina. La intensidad de la contienda no ha dejado de multiplicarse décima a décima en cada especial, a lo largo de las cuatro jornadas de competición de este Montecarlo; e increíblemente, se ha prolongado hasta los compases finales del decimoséptimo y último tramo: cómo no, el mítico Turini.
Ahí ha sido donde Rossel, en virtud a un desempeño soberbio durante los tres tramos decisivos, que conoce al dedillo, le ha robado la cartera a Pepe por tan solo 4 segundos… Una diferencia irrisoria, que no empaña lo más mínimo el rally de categoría que se ha marcado Pepe, eclipsando por completo al hijo del campeón del Mundo de 2003, Oliver Solberg, piloto referencial de Skoda Motorsport, en cuyo perfil oficial han abundado estos días publicaciones y parabienes elogiando el 'Monte' de tronío que ha rubricado el madrileño. No es para menos: su debut con el Fabia invita a soñar.