Los All Blacks pasan por encima de Argentina y están en la final

Llegó la hora y el día en el que los mejores equipos de los grupos A y B se veían las caras con los mejores equipos de los grupos C y D. La desigualdad entre selecciones ha quedado plasmada tras la primera semifinal. Argentina nunca fue rival en un partido que dominaron los de negro de principio a fin (aunque Los Pumas se adelantaran 0-3 en los primeros minutos tras un golpe de castigo transformado por Nico Sánchez).

Tras una primera parte de dominio All Black, pero con aproximaciones a la línea de 22 de los argentinos, la semifinal acabó literalmente en los diez primeros minutos de la segunda parte.

El 20-6 con el que se llegó al descanso daba una chispa de 'vida' a Los Pumas que cortaron de raíz los neozelandeses con dos ensayos que dejaban una distancia en el marcador (34-6) insalvable para los de blanco y celeste. El goteo de ensayos fue cayendo para los de negro y hasta con un jugador menos (por la amarilla a Scott Barrett) siguieron posando el balón en zona de marca argentina.

Entre los minutos 16 y 21 de la segunda parte, Ian Foster, introdujo hasta seis cambios en su equipo siendo conocedor de que el partido estaba cerrado y de esta manera daba descanso de cara a la gran final a jugadores clave como el medio melé Aaron Smith, el segunda línea Sam Whitelock o el zaguero Beauden Barrett.

Los fallos a palos del apertura Richie Mo'unga pudieron ampliar el resultado, pero esto, y con la diferencia de nivel vista sobre el campo, poco importó al conjunto neozelandés. Un Will Jordan excelso acabó con tres ensayos convirtiéndose en el traman del torneo y los All Blacks sumaron cuatro ensayos más a los tres de la primera parte y el resultado final se cerró con un aplastante 6-44 para los jugadores dirigidos por Ian Foster.

Gran victoria para los All Blacks que están a un partido de convertirse en la mejor selección de todos los tiempos, y dura derrota para Los Pumas que pese no haber practicado un juego lúcido y bueno durante el Mundial, lucharán por igualar su mejor clasificación mundialista en el partido por el bronce.

El primer enfrentamiento que cruzó a los equipos del grupo A y B con los de los grupos C y D demostró y confirmó la realidad vivida durante la fase inicial mundialista. Hasta este viernes habíamos vivido dos mundiales, dos niveles de rugby diferentes, hoy esta diferencia se vivió sobre el césped y Argentina fue la víctima de uno de los dos grandes verdugos del Mundial.

Tan sólo Inglaterra este sábado (21h) puede demostrar estar a la altura de los grandes equipos de los grupos A y B. Sudáfrica pondrá a prueba al XV de la Rosa y a ese Mundial C/D que en el día de hoy ha quedado retratado.