Fin de semana para la historia en el Seis Naciones

Tras la revolución llegó la calma en esta jornada 3 del Seis Naciones, que ha dado mucho de sí. Dos partidos en el sábado y uno el domingo aseguraban un fin de semana oval en todos los aspectos. Y así fue. Mucho, mucho se habló de rugby este fin de semana tras los resultados de la tercera jornada del torneo.

Los irlandeses han puesto la directa para revalidar la victoria del año pasado con un Jack Crowley que ha tomado el relevo de Sexton de la mejor manera posible. Irlanda vuelve a ser la favorita entre mundiales, y aunque tuvo que esperar a la última jugada para conseguir el punto bonus ante Gales (31-7), con 15 puntos sobre 15 posibles es la indiscutible candidata para volver a levantar la copa de campeona del Seis Naciones.

Otra cosa, será el Grand Slam. Si los irlandeses consiguen ganar a Escocia e Inglaterra volverían al alzarse con el trofeo más codiciado del torneo por segunda vez consecutiva, un logro que nunca han conseguido antes y que pasaría a ser un hito histórico para el rugby irlandés.

Eso sí, los dos grandes aspirantes no se lo pondrán nada fácil, primero Inglaterra en Twickenham, Londres en la jornada 4 y en la jornada final los escoceses en su visita al Aviva Stadium de Dublin.

Por su parte los galeses, tras el empate italiano, aunque siguen estando por delante de los mediterráneos, son el único equipo que tiene todavía opciones a llevarse la cuchara de madera tras su cero de tres en partidos ganados. La última jornada enfrentará a Azzurri y Dragones en el partido que definirá casi con total certeza, la última posición del torneo.

Tras el inicio de la jornada con el Irlanda vs Escocia, llegó el turno de la Calcutta Cup disputada en Edimburgo. Los escoceses llegaban con unos resultados muy a favor durante los últimos años, cinco copas de los últimas seis disputadas se quedaron en Escocia, pero Inglaterra llegaba invicta en las dos primeras jornadas y con opciones a todo a este trascendental partido.

El entrenador escocés, Gregor Townsead, había tildado el encuentro como El partido del año para los suyos, llegando muy heridos tras la derrota con polémica ante Francia en la anterior jornada.

Escocia dominó, fue mejor y se quedó de nuevo con la Calcutta en Edimburgo tras la diferencia de nueve puntos en el marcador que reflejó el marcador final (30-21).

La victoria se escribió con letras de oro en el rugby escocés ya que desde 1895, el XV del Cardo no conseguía cuatro Copas de Calcuta consecutivas.

Tras la Calcutta Cup, parecía que el partido disputado en Lille el domingo sería un cierre de jornada sin sorpresas. El XV del Gallo, que venía de ganar a Escocia, recibía en casa a la última clasificada con tan solo un punto en su casillero, Italia.

Pero este fin de semana, tenía preparado a todos los amantes del deporte oval una traca final difícil de olvidar.

Italia plantó cara a los franceses, que cada vez se hacían más pequeños ante el descaro de la juventud italiana y la cara de Fabien Galthié, entrenador francés, era un cuadro de lo que estaba ocurriendo sobre el césped del estadio Pierre Mauroy de Lille.

Italia llegó a disponer de una patada para ganar el partido con el tiempo cumplido pero Paolo Garbisi la estrelló en el palo derecho de la "H" francesa, tras el infortunio de haberse caído el balón cuando iba a patear y la ilegalidad muy protestada a posteriori por los italianos en la carga de dos jugadores franceses cuando el pateador italiano se disponía a chutar el melón hacia los palos (en los golpes de castigo, como era el caso, está prohibido subir a presionar la patada).

Con estos últimos segundos de infarto, se llegó al pitido final con empate a 13 puntos. Un resultado amargo y dulce a la vez para los italianos, que se libran de la cuchara de madera pero que pudieron ganar en la última jugada.

Un resultado muy preocupante para los franceses que tras una derrota contundente ante Irlanda en casa (17-38), una victoria con polémica ante Escocia (16-20) a domicilio y este empate a 13 a Italia se colocan antepenúltimos en la tabla y con casi todas la opciones descartadas para optar al título.