La última de Kyrgios en las ATP Finals: "Somos malos para el deporte, nadie nos quiere ver jugar..."
El australiano asegura que solo está jugando el torneo porque se clasificó con su amigo Kokkinakis. "Si no, no estaría aquí", dice.

Nick Kyrgios estuvo la semana pasada en México en una exhibición y el domingo por la noche aterrizó en Turín. Unas 12 horas después de llegar a su hotel, el australiano ha debutado este lunes en las ATP Finals. No ha habido sorpresa: ha perdido junto a su compañero y amigo Thanasi Kokkinakis, que llevaba varios días entrenando solo.
"Si no me hubiera clasificado con él, no estaría aquí", ha reconocido Kyrgios después de la derrota por 6-7 (3-7), 6-4 y 10-5 en la pista central del Pala Alpitour. "Está claro que la preparación no ha sido la ideal", ha añadido el polémico tenista australiano.
Finalista de Wimbledon este año, Kyrgios tiene muchas ganas de volver a Australia y pasar tiempo en su país. Disputó a principios de octubre en Tokio su último partido y después aseguró que ya no volvería a jugar hasta 2023. Pero se clasificó al torneo de maestros junto a Kokkinakis y decidió acudir. Tarde, pero acudió. "A ver cómo nos va en el torneo, pero no veo la hora de volver a casa", ha señalado.
¿Reconoces la canción? 😉
— ATP Tour en Español (@ATPTour_ES) November 14, 2022
Así salieron @TKokkinakis y @NickKyrgios a pista este lunes en su primer partido de las #NittoATPFinals 🎤
«Lo que hacemos los australianos está subestimado»
El bad boy del tenis ha tirado de ironía cuando le han preguntado si se sienten como modelos para los niños. "No, somos malos modelos a seguir, somos malos para el deporte, a nadie le gusta vernos jugar y no somos los favoritos del público", ha comentado en rueda de prensa mientras Kokkinakis aguantaba la risa.
Además, ha señalado que se debería valorar más los esfuerzos que hacen los tenistas australianos para competir prácticamente todo el año tan lejos de casa. "Los calendarios son brutales para los australianos. Tenemos que volar cinco o seis horas para cada torneo. Solo estamos dos meses al año en casa mientras que el resto está unos seis meses. Mi nivel de energía está muy bajo ahora mismo", ha comentado. "Lo que hacemos los australianos está muy subestimado. la gente no entiende lo duro que es esto".