MASTERS 1000 CINCINNATI

Carlos Alcaraz contesta a Djokovic y matiza el elogio que le dedicó tras la final de Wimbledon

El murciano, número uno del ranking mundial, no está de acuerdo con su rival en la final del Masters 1000 de Cincinnati.

Carlos Alcaraz celebra la victoria ante Hubert Hurkacz en semifinales de Cincinnati./REUTERS
Carlos Alcaraz celebra la victoria ante Hubert Hurkacz en semifinales de Cincinnati. REUTERS
Daniel Arribas

Daniel Arribas

En Cincinnati, poco después de vencer al polaco Hubert Hurkacz en semifinales gracias a una brillante remontada, Carlos Alcaraz atendió a los medios de comunicación en la sala de prensa del Lindner Family Tennis Center. Entre sonrisas, mueca habitual en su rostro, el murciano respondió a todas las preguntas mientras, a pocos metros, Novak Djokovic, su gran rival esta temporada, disputaba la otra semifinal del torneo ante Alexander Zverev.

"Jugar ante Alcaraz es el mayor de los retos", aseguró el serbio minutos después en el mismo micrófono, ya con la victoria y el pase a la final en el bolsillo. Un halago que, por habitual, no deja de sorprender al joven tenista de El Palmar.

El de Belgrado, mucho más experimentado —tenista masculino con más Grand Slams de la historia: 23—, ya se rindió en elogios hacia Carlitos cuando cayó derrotado ante el murciano en la última final de Wimbledon: "Su juego es una mezcla de elementos de Roger [Federer], Rafa [Nadal] y míos. Tiene lo mejor de los tres mundos".

Carlos Alcaraz responde a Novak Djokovic en Cincinnati.ATP MEDIA

Ahora, un mes después, y en vísperas de otra final en la que ambos medirán sus fuerzas, Alcaraz ha querido mostrar su disconformidad con Djokovic en torno a su tenis y el 'Big-3'. "Es genial que alguien como él diga estas cosas. Al final, él ha jugado contra el mejor Nadal y contra el mejor Federer, pero no estoy del todo de acuerdo", declaró en la sala de prensa.

"Yo siempre digo que soy 100% Carlos Alcaraz", sentenció. "Nunca he seguido los estilos de Rafa, de Roger o de Novak, solo intento crear mi propio camino y hacer desde cero a Carlos Alcaraz. Creo de verdad que no tengo características de nadie que no sea Carlos Alcaraz".

Un duelo más entre Djokovic y Alcaraz

Hasta ahora, Alcaraz y Djokovic se han enfrentado en tres ocasiones. El balance sonríe al español, que ha ganado dos encuentros y solo ha perdido uno contra el serbio. El primer duelo fue en el Masters 1000 de Madrid de 2022, cuando el murciano sacudió los cimientos del tenis mundial y se llevó el torneo tras vencer por el camino a Nadal, en cuartos, y a Djokovic, en semifinales (6-7, 7-5, 7-6).

El segundo duelo entre ambos tuvo que esperar algo más de un año, cuando, en un clima de partido histórico, de esos que se recuerdan durante años, Djokovic y Alcaraz midieron sus fuerzas en las semifinales de Roland Garros. Pronto quedaron rotas las expectativas, eso sí. Una repentina lesión del murciano lastró su físico y, agarrotado, negado a abandonar, terminó el partido por encima de sus calambres e hincando la rodilla ante Djokovic (3-6, 7-5, 6-1, 6-1 para el serbio).

Alcaraz y Djokovic se saludan tras la final de Wimbledon. AFP
Alcaraz y Djokovic se saludan tras la final de Wimbledon. AFP

El tercero y último, más reciente, volvió a caer del lado del tenista de El Palmar, que venció a Djokovic en su jardín favorito. Alcaraz se rehizo de un inicio frío en el All England Lawn Tennis y Croquet Club, donde entregó el primer set sin mostrar apenas resistencia, y terminó dándole la vuelta a la final en cinco sets (1-6, 7-6, 6-1, 3-6, 6-4).

Ahora, un mes después del choque en la hierba de Londres, justo cuando Djokovic se rindió en elogios hacia Carlitos, comparándolo con el Big-3 del tenis mundial, ambos medirán sus fuerzas en Cincinnati (a partir de las 22:30h, hora peninsular). Después, llegará el US Open, y más adelante, la Copa Davis, donde España y Serbia se enfrentarán en el pabellón de la Fuente de San Luis, en Valencia.

Allí, Alcaraz y Djokovic harán historia, ya que se enfrentarán defendiendo los colores de sus respectivos países como número uno y número dos del mundo, algo que nunca ha ocurrido en la historia del tenis. Un incentivo más para una rivalidad que tiene todos los ingredientes para ser legendaria.