TENIS
Carlos Alcaraz empezará la temporada en tierra batida a 380 puntos de Djokovic
El murciano comenzará la gira por el polvo de ladrillo en el Masters 1.000 de Montecarlo.
El próximo lunes Carlos Alcaraz verá el ranking ATP y ya no estará en lo más alto del mismo. La derrota ante Jannick Isner en las semifinales del Master 1.000 de Miami no sólo le ha dejado sin la posibilidad de revalidar el título conquistado hace un año, sino que también le hará ceder el número 1 del mundo ante Novak Djokovic.
"Es perder una semifinal. No piensas en el número uno. No pienso en eso. Es una pena pero en lo que tengo que pensar es en cómo mejorar para ganar a Jannik. Para mí lo que cuenta es haber perdido la semifinal de un torneo", aseguraba el tenista de El Palmar tras la derrota con el italiano.
"Es perder una semifinal. No piensas en el número uno. No pienso en eso"
Un tropiezo por el que empezará la temporada en tierra batida a 380 puntos de distancia de Novak Djokovic, que a partir del lunes será el nuevo número 1 del mundo. El serbio comenzará la semana con 7.160 puntos por los 6.780 de un Alcaraz que no ha podido defender los 1.000 puntos que obtuvo el año pasado tras conquistar el torneo en Florida.
El tercer puesto lo conserva el griego Stefanos Tsitsipas, con 5.770. Cuarto figura el noruego Casper Ruud, con 5.005 en este momento tras perder 555 en Miami. Quinto es el ruso Daniil Medvedev, quien hoy tiene 4.750 y de ganar mañana a Sinner en la final del Miami Open llegará hasta los 5.150 que le harían adelantar a Ruud.
Con estos números Alcaraz intentará volver al número 1 del mundo a través del polvo de ladrillo, cuya temporada comenzará el próximo 10 de abril en el Masters 1.000 de Montecarlo, antes de viajar a Barcelona para disputar el Godó. Madrid y Roma serán las siguientes paradas antes de llegar a Roland Garros.
"Después del partido, durante unos minutos, no puedo hablar con nadie. Me dura 20, 25 minutos"
Alcaraz ya tiene la vista puesta en la arcilla para intentar recuperar sus mejores sensaciones, tras el frenazo sufrido ante Sinner. Una derrota en la que el tenista murciano repitió el ritual que confesó que 'sufre' tras cada derrota: "Después del partido, durante unos minutos, no puedo hablar con nadie. Estoy quejándome, todo es una mierda para mí, pero cuando pasa ese tiempo ya comienzo a pensar en las cosas positivas, del partido, de la temporada, del torneo, hablándolo con mi equipo, mi familia. Me dura 20, 25 minutos".