Los gritos de la pista contigua a la de Carlos Alcaraz que advirtieron de la primera hazaña del Godó: "Oh... ¡mágico Munar!"
Jaume Munar obtuvo su victoria 100 con una espectacular remontada a Tiafoe.

Mientras que Carlos Alcaraz se complicaba el segundo set de su partido de primera ronda del Godó, con un ambiente algo frío por momentos, desde la grada donde jugaba el murciano se oía un griterío tremendo procedente de una pista contigua, la que lleva el nombre de Andrés Gimeno. Fuertes aplausos y bramidos de sorpresa, en positivo, hacían presagiar que algo excepcional sucedía en la tierra batida donde jugaban el americano Frances Tiafoe, número 18 del mundo, y el balear Jaume Munar, ranking 57 de la ATP.
Cada vez que se detenía el juego en la central, buena parte de los espectadores que estaban en el córner más cercano a la Andrés Gimeno se giraban para ver el espectáculo en la pista ubicada justo al lado. "Perdió el primer set e iba 3-1 también perdiendo el segundo con Tiafoe, que estaba jugando muy bien... pero le ha terminado ganando 7-5. Y en el tercero le ha arrollado", le comentaba uno de los asistentes a otro.
Es que el tenista mallorquín, al que le llegaron a colgar el cartel de 'nuevo Nadal', protagonizó la primera machada del Godó, con una remontada increíble al cabeza de serie número nueve del torneo, muy favorito en su llave. Con un parcial de 12-3, el de Santanyí terminó por pasar de ronda mientras parte de los asistentes a su partido coreaban "Oh... ¡mágico Munar! Oh... ¡mágico Munar", un cántico que, como los bramidos y las palmadas anteriores, llegaron a la pista Rafa Nadal y advirtieron de la primera hazaña del Godó 2025 a todo el público asistente. Munar venció 6-2, 5-7 y 1-6 en dos horas 41 minutos para citarse con Khachanov o Norrie en octavos de final.
"Ha sido un partido muy complicado. A nivel tenístico he estado lejos de lo que me gustaría, pero creo que a nivel de persistencia mental y físico he estado bien y he podido levantar un partido que se antojaba muy muy difícil. Estoy muy contento por eso y por tener una oportunidad más", dijo en zona mixta Jaume Munar, de los más sonriente tras la gesta.
"El final del segundo set ha sido apretado y clave. Él ha bajado a nivel físico y mental en el tercero. Yo he aprovechado ese momento. Pero sí, los juegos del 5-5 hasta el 7-5 han sido los más importantes", sentenció Munar, que supo exprimir las debilidades de su rival: "Son cosas que pasan y cada uno tiene sus historias. Supongo que de pasar a tener el partido prácticamente ganado a verse en esa situación no lo habrá gestionado de la mejor manera y el resultado es el que es. Yo me ciño a lo que tengo que hacer yo".
"No vengo jugando un buen tenis durante este año. La realidad es que me está costando la adaptación a la tierra batida, pero se trabaja para darle la vuelta. Creo que puede ir mucho mejor", lo cerró el balear en su victoria número 100 como tenista profesional: "Es un número especial. Juego para partidos como este, para jugar contra los mejores del mundo y que sea en casa lo hace aún más especial".