TENIS

Daniil Medvedev lleva un 33... pero no es por Fernando Alonso

El tenista ruso aparece con el número de moda en el Mutua Madrid Open.

Medvedev aparece en la rueda de prensa del Mutua Madrid Open con un 33./MUTUA MADRID OPEN
Medvedev aparece en la rueda de prensa del Mutua Madrid Open con un 33. MUTUA MADRID OPEN
José M. Amorós

José M. Amorós

La palabra del año 2022 fue "inteligencia artificial". La Fundéu, encargada de otorgar el premio, lo definió como una expresión y así evitó las críticas de que, como se habrán dado cuenta, son dos palabras y no una. Puestos a abrir la mente e innovar, ahora los catedráticos podrían elegir, sin ninguna duda, a un número como la palabra del 2023: el 33. La euforia con Fernando Alonso, las buenas sensaciones primero y los grandes resultados después, han creado un fenómeno viral que se extiende por las redes sociales alrededor de las dos cifras.

La victoria del asturiano a los mandos de su Aston Martin todavía no ha llegado, pero el 33 se ha unido a su figura de una manera pocas veces vista antes. De lo que nadie se había dado cuenta antes era que otra de las grandes estrellas del deporte mundial lleva años eligiendo este número como su favorito y que ha llamado la atención al equipo de Relevo que cubre estos días en Mutua Madrid Open.

Eran las 17:13h. de este miércoles, cuando los altavoces de la zona de prensa anunciaban por sorpresa la rueda de prensa pretorneo de Daniil Medvedev. Varios periodistas se encaminan por el pasillo que separa el lugar de trabajo de la sala de conferencias, donde irrumpe el físico imponente del ruso por delante de todos con una vestimenta deportiva de estilo vintage. En su espalda, un gran 33. Al adelantarle para ocupar los asientos, otro 33 más pequeño en su pecho. En las mangas, un estampado de cuadros negros y blancos similar a los de la bandera a cuadros que dan por terminadas las carreras de motor.

El número no es extraño para el actual número 3 (que no 33) del ranking mundial de la ATP. Su nick de Instagram, desde su salto a la élite, ha sido @medwed33. Evidentemente y por la longevidad de la cuenta en la red social, nada puede tener relación con la explosión viral de Alonso y la Fórmula 1. Pero, la pregunta es clara: ¿por qué 33?

La historia nos lleva al fútbol

Desde Relevo, consultamos a la marca que le viste, la francesa Lacoste. La respuesta tiene, a priori, poco que ver con Medvedev y su gusto por la cifra. "Es el año de fundación de la marca", comentan señalando la creación de la conocida marca del cocodrilo en 1933 y que ahora cumple 90 años. Aunque el número en la chaqueta utilizada en Madrid pueda tener esa explicación cuando lo plasmaron, algo no cuadra: Medvedev lleva desde antes de su contrato con Lacoste apostando por el 33 en sus redes sociales.

La sorpresa viene cuando buscando más información la historia nos aleja de la Fórmula 1, que provocó el primer pensamiento para realizar este texto, y nos lleva sin esperarlo al fútbol. Medvedev es un gran aficionado al Bayern de Múnich desde que era un niño. "Recuerdo cuando tenía 6 años y el Bayern era realmente bueno a principios de la década de 2000. A mis padres siempre les decía: juega el Bayern, tenemos que verlo", comentó Medvedev en una entrevista con el medio alemán SPOX en 2021.

Ahí, en el Bayern y en su plantilla de los 2000 está el secreto del favoritismo de Medvedev con el omnipresente 33. Una de las estrellas del equipo bávaro durante esos años tenía nombre español, aunque era alemán, y portaba el 33 en la espalda: Mario Gómez. "Soy un gran admirador de Mario Gómez. Hizo cosas grandiosas cuando jugaba para el Bayern, me gustaba tanto... Era, por mucho, mi jugador favorito y por eso el 33 es mi número favorito".

Hay más vida en el 33 que la de Fernando Alonso y Aston Martin. Medvedev, uno de los mejores del mundo, también se encomienda a este número para lograr sus objetivos, que estos días pasan por Madrid. Curiosamente, por una afición al fútbol para muchos desconocida y con un delantero, que otros tantos habrán borrado de su mente en los últimos años, como protagonista.