TENIS

Un rival íntimo de Alcaraz se encomienda al mito que pasó por la cárcel y descubrió al mejor Djokovic

Holger Rune, número seis del mundo y buen amigo del murciano, entrenará desde ahora con Boris Becker, leyenda del tenis y ganador de seis Grand Slams.

Boris Becker junto a Novak Djokovic, en Wimbledon./GETTY
Boris Becker junto a Novak Djokovic, en Wimbledon. GETTY
Daniel Arribas

Daniel Arribas

El curso tenístico encarrila el tramo final de la temporada, pero el árbol nunca deja de agitarse. Tras una campaña en la que se ha asentado, no sin altibajos, en el Top-10 del ranking ATP, el danés Holger Rune, de 20 años, rival y amigo de Carlos Alcaraz, ha dado un vuelco a su todavía corta carrera para ponerse a las órdenes de Beris Becker, leyenda de la raqueta y vencedor de seis Grand Slams: tres Wimbledon, dos Open de Australia y un US Open.

El extenista alemán, de 55 años, regresa así al circuito profesional tras un polémico paso por prisión, donde ingresó en 2022 tras ocultar tres millones de euros que debería haber destinado al pago de unas deudas que acumulaba tras haberse declarado en bancarrota cinco años antes. Condenado en un principio a dos años y medio de cárcel, Becker fue puesto en libertad a los pocos meses de entrar al centro penitenciario de Huntercombe, en Reino Unido.

Ahora, menos de un año después de ser puesto en libertad, Becker ha confirmado en el podcast alemán 'Das Gelbe vom Ball' que será el nuevo entrenador de Rune. "Estoy muy orgullos de que haya sido él quien me lo pidiera", ha declarado el germano. "Tenemos contacto desde hace tiempo y ahora mismo encajaba todo a la perfección. Mi calendario me lo permite y Holger siempre me ha despertado interés por su compromiso y su carácter en la pista"

Hace meses, el propio Rune invitó a Becker a una semana de entrenamientos en Montecarlo. Sin saberlo, allí se gestó todo. "Tuve una larga charla con su madre, Aneke, y su preparador físico, Lapo Becherini", ha señalado el extenista. "A partir de ahora, los tres seremos el equipo de Holger. Sin embargo, no podré acudir esta semana en el torneo en Estocolmo debido a citas previamente concertadas. Estaré con él a partir de Basilea y espero poder ayudarle a estar en las ATP Finals de Turín. Ese es el gran objetivo".

Becker, campeón precoz en pista, aunque de vida turbulenta fuera, conoce muy bien a su nuevo discípulo, pues ya tuvo a otro similar hace años. "Me gustan los jugadores con esos arrebatos emocionales. En cierto modo, me recuerda a Djokovic, a quien ya he podido entrenar con anterioridad".

Con el serbio, todavía en el circuito y a un nivel excelso, Becker comenzó a trabajar en 2014, y mantuvo vínculo laboral con él hasta dos años más tarde. Casualidad o no, la mejor versión de Nole despertó a las órdenes de Boom Boom: seis Grand Slams en tres temporadas, incluyendo sus primeros títulos en Roland Garros y en el US Open.

Con todo, el entrenador alemán sabe que cada tenista es un mundo y que la edad influye. Rune todavía tiene 20 años, siete menos que Djokovic cuando el serbio comenzó a trabajar con Becker. "Sería una tontería pensar ahora que Holger va a convertirse en el número uno del mundo o que va a ganar Roland Garros el año que viene", declaró el extenista en el podcast alemán.

"Sin duda, es uno de los mejores jugadores jóvenes del mundo y creo que se sienta en la misma mesa que Carlos Alcaraz o Jannik Sinner. Una mesa en la que, por cierto, pronto reclamarán su sitio tenistas como Ben Shelton o Sebastian Korda", añadió. "Mi ambición ha de ser la de encontrar al mejor Rune, y para ello tenemos que pensar detenidamente qué torneos jugará y cuáles no. Si compite todas las semanas, llegará el cansancio y, con ello, las lesiones. La planificación es crucial y, a partir de ahora, soy corresponsable del éxito que pueda tener Holger".

Con la vuelta de Becker al circuito, son ya varios los extenistas de gran nivel que guían a las grandes raquetas del circuito. Mientras el alemán une su camino al jovencísimo tenista danés, Carlos Alcaraz continúa a las órdenes de Juan Carlos Ferrero, Rafa Nadal sigue trabajando con Carlos Moyá y Djokovic, por su parte, se prepara junto a Goran Ivanišević, todos ellos vencedores de al menos un major.