El disco duro que tiene por cerebro Arthur Fils y su físico asombran a Carlos Alcaraz: "Recuerda todos los puntos de un partido"
Arthur Fils, que ya puso contras las cuerdas al murciano en Montecarlo, ha empezado como un ciclo en el Conde de Godó.

Hay un francés de 20 años que se pasea por el Real Club Tenis de Barcelona con la seguridad del que crece a cada paso, especialmente en este último año en el que ha cambiado de entrenador y ha dado un salto adelante en el circuito. En el Masters 1000 de Montecarlo tuvo contra las cuerdas a Carlos Alcaraz, que finalmente tiró de talento y experiencia para superar los momentos de dificultad en los cuartos de final, y se llevó el partido. Pero Arthur Fils, el ya tenista número uno de Francia, se quedó con lo positivo, con que tuteó al ganador de cuatro ya Grand Slams y número dos del mundo. Y ha llegado a este Barcelona Open Sabadell-Conde de Godó a toda mecha.
Ahora mismo ha ascendido al número 14 del ránking y sus progresos no pasan desaparcibidos para el propio Alcaraz, que preguntado sobre los jóvenes, en su aterrizaje en Barcelona, no dudó en destacarlo y en piropear sus cualidades. "... Y Fils. Salí asombrado por primera vez después de jugar contra él, por su fuerza, físico, su nivel. Estamos en un momento en el que hay un abanico amplio que puede hacer grandes cosas", dijo el murciano, que bien sabe lo que es sufrir ante el francés: 4-6, 7-5 y 6-3. "Mi objetivo es jugar bien siempre, quiero jugar bien en Madrid, en Londres, en Francia. Quiero trabajar duro en la pista para jugar mejor", dijo en el Godó.
Este miércoles, después de noquear a Pablo Carreño en primera ronda (7-6 y 6-3), hizo lo propio con otro español, Pedro Martínez, en menos tiempo y con cinco aces (6-3 y 6-2). No ha perdido un solo servicio en estos dos partidos y ahora espera en los octavos de final al ganador del Korda-Tsitsipas. "He ganado experiencia, he jugado más partidos, he vivido muchas situaciones el último año. En 2024 jugué fantástico, pero hubo momentos de dudas, pero creo que he cambiado, y ahora estoy mucho mejor", dijo después en la sala de prensa.
Uno de los puntos clave, que destaca el francés que ganó Roland Garros júnior, es el cambio de entrenador. Ahora se encarga de él Laurent Raymond, exentrenador de Corentin Moutet, que fuera 51 del mundo, y quien no tiene dudas de las cualidades de su nuevo alumno como explicó este año en una entrevista en L'Èquipe en la que detalla lo que percibe en Fils. "Su principal cualidad y lo que más me impresiona de él es la capacidad que tiene para entender e integrar la información. Es muy lúcido especialmente en las revisiones de partido", introduce. Y va a más.
Raymond considera que el autoconocimiento y la capacidad de mejora continua analizando el propio juego son clave, y que Fils tiene una mente privilegiada para ello: "La autocrítica no le asusta. Y forma parte de esos jugadores que recuerdan casi todos los puntos de un partido, lo cual es esencial para sacar lecciones. Él era imbatible en eso. Los mejores son tipos reflexivos, que aprenden rápido gracias a una especie de disco duro donde graba todo", añade.
Confianza en llegar rápido al top-ten y Barcelona es un comienzo
El tenista, que le resta importancia a ser el número uno de un país que mantiene la fiebre por el deporte de los Juegos de París ("ni siento más presión ni es más divertido", dijo), se plantea entrar en el top ten, algo que su entrenador considera que no le deberá costar: "Si todo va bien, si no hay lesión, no veo qué podría impedirle entrar en ese top 10". En apenas seis meses, ha entendido todo lo que le ha planteado el nuevo técnico. "El top ten tiene mucha demanda. En Francia tuvimos grandes tenistas que compitieron por títulos, ahora estamos viniendo otros", resume.
Fils tiene una gran oportunidad en Barcelona de dar un golpe encima de la mesa. Este jueves, si se cumplen las previsiones, le tocará medirse a Tsitsipas, el número 16 del ránking, que está a la espera de unirse a Ivanisevic y que tiene un gafe en un Conde de Godó en el que ha ofrecido un gran tenis pero siempre se ha topado con un hueso. A veces llamado Nadal, otras Alcaraz. Y ahora Fils puede tener una oportunidad de seguir cargando su disco duro.