Un par de milímetros muestran la crueldad del tenis con Alejandro Davidovich: "Qué injusto es este deporte"
El español desperdicia una ocasión de oro para levantar su primer título ATP. Una bola que casi roza la línea le privó del triunfo.

Alejandro Davidovich está a un suspiro de ganar, por fin, su primer título en el circuito ATP. El malagueño, dueño de un tenis privilegiado, está ganando a Miomir Kecmanovic en la final de Delray Beach por 6-3, 1-6 y 5-2. Resta para ganar y se procura un 15-40, es decir, dos pelotas de campeonato. Se relame, el título le espera. Pero un rato después el que levanta la copa es Kecmanovic, que encadena cinco juegos consecutivos para derrumbar por completo a un Davidovich que no puede levantarse tras recibir dos puñetazos al mentón. Y todo por un par de milímetros.
El primer match point es un punto larguísimo, un intercambio desde el fondo de la pista entre Davidovich y Kecmanovic que se resuelve con un derechazo paralelo del español. La pelota se va ancha por un par de milímetros y Davidovich pone cara de no creerse lo que acaba de pasar mientras las pantallas muestran el ojo de halcón del bote de la bola.
Pero es que a los pocos segundos, en el segundo punto de partido, Kecmanovic conecta una volea y la pelota toca la red antes de aterrizar al otro lado. Desde luego, la suerte no está del lado de Davidovich, que vive en primera persona la extrema crueldad del tenis, uno de los pocos deportes que no están delimitados por tiempo y que puede cambiar de destino hasta el último suspiro.
Exnúmero 21 del ranking ATP, Davidovich acaba de dejar pasar una ocasión inmejorable. Y acto seguido, su cabeza se desploma. Pasa de estar 5-2 y 40-15 a sacar con 5-5 y 0-40 en contra. En ese momento, se acerca a su esquina para secarse el sudor con la toalla y le dice a su equipo unas palabras. "Qué injusto es este deporte, qué injusto es, qué injusto es", se lamenta, mientras en su cabeza rebotan todavía esos dos match points desperdiciados.
El malagueño acaba derrotado 7-5 en el tercer set y pierde la oportunidad de inaugurar su palmarés en el circuito ATP. La de Delray Beach, un torneo de categoría 250, es la segunda final que pierde Davidovich, después de aquella del Masters 1000 de Montecarlo de 2022.
El recuerdo de David Ferrer
La escena de la pelota ancha de Davidovich en el primer match point trajo a la memoria de muchos aficionados españoles lo que le ocurrió a David Ferrer en la final de Miami 2013 cuando estaba peleando ante Andy Murray por su primer título de categoría Masters 1000.
Ferru iba ganando 6-2, 4-6 6-5 cuando tuvo un match point al resto. Murray pegó una derecha muy profunda y dudosa, tanto, que el alicantino paró el punto para solicitar el ojo de halcón. La repetición mostró que la pelota rozó la línea por fuera y Ferrer terminó perdiendo en el tie break decisivo de ese tercer set.