Sara Sorribes cae en el tercer partido más largo de la historia del torneo: ¡3 horas y 51 minutos!

París.- Había motivos para soñar, para creer en algo gordo de Sara Sorribes en Roland Garros, pero la española ha acabado despidiéndose del Grand Slam parisino tras una batalla tremenda, agónica, eterna: tres horas y 51 minutos para convertirse en el tercer partido más largo de Roland Garros desde 1968, cuando empezaron los registros.

Sorribes ha caído por 6-7 (3-7), 6-3 y 7-5 ante Beatriz Haddad-Maia, la número 12 del ranking WTA, que despertó cuando estaba al borde del abismo en el segundo set y acabó imponiendo su veteranía en un encuentro igualadísimo y agotador. Cada punto había que ganarlo cinco veces. "Ha sido mucho emocionante. Estoy muy orgullosa de haber podido ganar un partido tan tan duro", dijo la brasileña nada más cerrar el partido con un winner de derecha.

Por primera vez en los octavos de un grande, Sorribes se apuntó el primer set tras romper a Haddad-Maia cuando la sudamericana sacaba con 5-4 y después con 6-5. Después, la española llegó a disfrutar de cuatro pelotas con su servicio para colocar el 4-0 en el segundo set. Era su momento. Pero todo cambió en un abrir y cerrar de ojos. Sorribes desperdició esa oportunidad y Haddad-Maia reaccionó para hacerle un parcial de 6-0 y llevar el encuentro al tercer y definitivo parcial.

Aquello fue una lucha física y psicológica descomunal, con las dos tenistas dejándose el alma en la pista y con puntos eternos, al límite. Triunfó Haddad-Maia y se despidió con honores Sorribes, salvando tres match points y con casi 10.000 personas en pie en la pista Suzanne Lenglen.

A pesar de la derrota, Sorribes se despide de Roland Garros con una grandísima experiencia en la mochila. Además de haber pisado sus primeros octavos de un Grand Slam, saltará casi 70 puestos en la clasificación mundial y regresará al 'top 60', lugar que abandonó tras fracturarse en septiembre del año pasado el escafoides del pie derecho. Además, se llevará un cheque de 240.000 euros.

Haddad-Maia se enfrentará el miércoles en los cuartos de final a la tunecina Ons Jabeur, séptima del ranking mundial y que un rato antes había vencido a Bernarda Pera por 6-3 y 6-1.

Sorribes todavía puede salir con un título de Roland Garros. Sigue con vida también en el cuadro de dobles, donde el domingo avanzó de ronda junto a la checa Marie Bouzkova en un partido con muchísima polémica. Iban ganando a Kato y Suitjadi por 7-6 y 1-3 cuando la japonesa dio un pelotazo, aparentemente sin querer, a una recogepelotas. Kato fue sancionada con un warning -una advertencia-, pero tras las quejas de Sorribes y Bouzkova el juez de silla finalmente decidió descalificar a la pareja.

Tras el encuentro, Sorribes y Bouzkova han recibido muchas críticas en las redes sociales, incluso de algunas jugadoras. En una respuesta a un tuit de Kato, en el que pedía perdón a la recogepelotas, la francesa Alize Cornet escribió: "Es una decisión loca. Lo siento por ti, pero muchos jugadores, excepto Marie y Sara, obviamente, te están apoyando".