Stefanos Tsitsipas arrolla en su debut en el Godó mientras Goran Ivanisevic calienta en la banda: "Pronto habrá noticias"

Tras caer en cuartos de final de Montecarlo, el eterno aspirante del Barcelona Open, Stefanos Tsitsipas, arrancó su andadura en el ATP 500 catalán con buen pie. Venció en la pista Rafa Nadal, la central del Reial Club de Tennis de la ciudad condal, al gigantón norteamericano Reilly Opelka, que venía de la fase previa. Lo de gigantón, por cierto, no es una exageración, pues el número 105 del mundo mide 211 centímetros y pesa más de 100 kilos.

De ahí que pudiese sacar a casi 230 kilómetros por hora y que complicara muchísimo al griego con su servicio en el comienzo del encuentro. No fue hasta el quinto juego cuando Tsitsipas hizo su primer break y encarriló el triunfo en primera ronda, en la primera ocasión que el cuadro final del Godó es de 32 tenistas, en lugar de los 48 habituales.

Ese primer break lo cambió todo, pues el tenista de Atenas a partir de entonces ganó siete juegos consecutivos y confirmó su candidatura al torneo barcelonés. Venció en apenas setenta minutos por 6-2 y 6-2 ante un Reilly Opelka incapaz en el intercambio que solo pudo dañar a su oponente con el servicio y que apenas ganó cuatro juegos a lo largo del partido.

"No recuerdo un año en que fuera fácil, no conozco atajos para llegar a la final en Barcelona. Es un ATP 500, los mejores del mundo quieren jugarlo", reconoció en la previa el número 16 del mundo, que ha perdido ocho puestos en ranking ATP durante los últimos días, tras caer con el finalista Lorenzo Musetti en el Masters 1.000 de Montecarlo.

El griego llega al Godó con una aspiración y una incógnita, casi resuelta. La primera es tratar de ganar por primera vez en su carrera el Barcelona Open, cuyo premio para el campeón es de medio millón de euros, tras haber sido finalista en hasta cuatro ocasiones (2018 y 2021 ante Rafa Nadal, 2023 ante Alcaraz y 2024 ante Casper Ruud). El propio Alcaraz y Casper Ruud, así como De Minaur y Rublev serán sus principales escollos.

Y la segunda es el enigma sobre quién será su próximo entrenador. Es un secreto a voces que el elegido es Goran Ivanisevic, extenista y que durante seis temporadas fue técnico de Novak Djokovic. Y ayer, en su primera comparecencia en Barcelona, Tsitsipas prácticamente lo confirmó: "No puedo decir nada oficialmente, pero pronto habrá noticias".