Cómo es el trofeo del US Open: cuánto pesa y de qué está hecha la copa fabricada por Tyffany&Co
A diferencia de los que sucede en el resto de Grand Slams, el ganador del US Open se lleva una réplica de la copa de campeón a tamaño real.
El mundo del deporte es una industria fundamentada en el prestigio. Determinar la importancia de un campeonato u otro, sin embargo, puede resultar más complicado. Por norma general el prestigio de un torneo viene dado por una suma de tradición, competencia y, claro, premio económico. En realidad, son tres categorías completamente enlazadas entre sí. No en vano, cuanta mayor sea la recompensa, es muy probable que también sea mayor el nivel de los participantes que toman parte. Finalmente, cuando esta competición sostiene a lo largo del tiempo, se genera una tradición propia.
En el golf esto se ve muy claro. La irrupción de Arabia Saudí con la LIV Golf inyectó muchísimo dinero al deporte. Aquello hizo que varias de las principales figuras se pasasen a la nueva competición. Sin embargo, esta carecía de la tradición que sí posee el Tour del PGA. El poder jugar en los mismos campos que jugó Seve Ballesteros, fue lo que por ejemplo retuvo a Jon Rahm en el viejo circuito. También a muchos aficionados, acostumbrados a las liturgias y sabor añejo de lo que ya conocían. ¿El resultado? Arabia Saudí tuvo que comprar también la tradición, fusionando su campeonato con la PGA.
En el mundo del tenis el prestigio se encuentra, sobre todo, en los Grand Slam. Son los torneos que aúnan todos los requisitos antes mencionados. Ofrecen las mayores bolsas económicas, los partidos a cinco sets en el cuadro masculino le otorgan una mayor dificultad y, además, cuentan todos ellos con una vasta tradición a sus espaldas. Ganar uno de los cuatro grandes es el objetivo de vida de todos los tenistas.
Todo ello se materializa en un objeto concreto, el trofeo de campeón. Una pieza tangible, cuyo valor supera con creces su coste monetario. Hablamos de objetos venerados como la Copa de los Mosqueteros de Roland Garros, la Challenge Cup de Wimbledon (o el todavía más icónico Plato de Venus del cuadro femenino), la copa Norman Brookes de Australia y, por supuesto, el trofeo de campeón del US Open.
De qué está hecho el trofeo del US Open
Se da la particularidad de que la copa que recibe el ganador del Grand Slam estadounidense no posee un nombre concreto. Sin embargo, su silueta es fácilmente reconocible. Se trata, además, de uno de los más valiosos en el sentido estricto del término. No en vano, el trofeo de campeón del US Open está fabricado de plata. Por ello, su elaboración debe ser manual, llevada a cabo por maestros de la orfebrería.
Desde 1987, la mundialmente famosa joyería Tiffany&Co es la encargada de fabricar la copa que acredita al campeón del US Open. La empresa, que se convirtió en icono global a raíz de la película Desayuno con diamantes, realiza el diseño y fabricación tanto del trofeo masculino como del femenino. Concretamente, esta actividad se realiza en el taller que Tiffany posee en Rhode Island.
Como sucede en todos los Grand Slam, los ganadores no se llevan el trofeo original a casa. Este permanece en la sede del club. Sin embargo, sí se llevan una réplica a tamaño original del mismo. Algo que no sucede en el resto de grandes del calendario, donde el premio para el jugador suele ser a escala. Por ello, el tiempo de fabricación del trofeo del US Open es importante. Entre lo intrincado de su fabricación y el tamaño del mismo, Tiffany&Co necesita algo más de cinco meses para producir la copa de campeón.
Cuánto pesa el trofeo
El trofeo de campeón del US Open posee una medida de 45,72 cm de alto, unos 15,24 cm de ancho y posee un peso de 3,8 kilos. Esto en el cuadro masculino. En el femenino, a pesar de que ambos torneos comparten la misma bolsa de premios, el trofeo que recibe la campeona es sensiblemente más pequeño.