¿Cuál es el precio las entradas para el US Open 2023 y dónde comprarlas?

El US Open es el Grand Slam más caliente del calendario. Y no únicamente por la gran cantidad de público que se concentra en las gradas del Arthur Ashe durante los días grandes. El público neoyorquino es ruidoso. No solo tiene fama de ello, sino que además la abraza como ningún otro, salvo quizá Australia cuando juegan Nick Kyrgios y Thanasi Kokkinakis. Además, se trata de una afición internacional. Tanto por la propia naturaleza de la ciudad, formada por gente llegada de todos los rincones del mundo, como por la oportunidad que supone el poder combinar una visita a la Gran Manzana con el mejor tenis del mundo.

Todos estos atractivos hacen que conseguir entradas para ver el US Open 2023 sea complicado. Aunque no imposible. Tampoco es barato, claro. Especialmente, en sus días clave. Como en todos los grandes, el acceso durante las primeras rondas es más sencillo que en los partidos clave, cuando los cabeza de serie se enfrentan entre sí. Aunque no siempre, claro. En el US Open de 2022, Serena Williams llenó el estadio de tenis más grande del mundo en las tres rondas que duró en competición hasta caer eliminada por Ajla Tomljanovic en tercera ronda. Nueva York tiene sus ídolos, y los honra hasta el final de sus carreras.

Comprar billetes para presenciar el Grand Slam estadounidense en directo es un proceso sencillo. Las entradas del US Open están a la venta a través de la sección tickets de la página oficial del torneo: https://www.usopen.org/en_US/tickets/individual_tickets.html

A partir de ahí, y una vez seleccionada la fecha y el tipo de pase que se desea, la propia web dirige al aficionado al portal Ticketmaster, canal oficial de venta de entradas. Este también es el método más seguro para comprar en reventa. De hecho, una búsqueda en Internet puede mostrar otros portales que ofertan butacas para presenciar los partidos, sin embargo siempre es recomendable acudir a los distribuidores oficiales para evitar posibles sustos en forma de comisiones u otros asuntos.

Lo primero es decidir el tipo de entrada que se quiere comprar. En total, el US Open se disputa en tres estadios diferentes: Grandstand, Louis Armstrong Stadium y el mundialmente famoso Arthur Ashe, la pista principal del torneo. Además, la organización pone a la venta pases al recinto, llamados ground pass, los cuales son más económicos y permiten acceso a todas las pistas excepto las tres mencionadas arriba. Es importante tener en cuenta que los pases para las tres grandes pistas son de día, dividiéndose entre turno de tarde y turno de noche.

El precio de las localidades para el US Open puede variar sensiblemente dependiendo de la ubicación de los asientos y la importancia de los partidos. De hecho, en la actualidad solo quedan localidades de reventa, por lo que los precios pueden variar incluso día a día. Inicialmente, las entradas más baratas para una sesión en la cancha Arthur Ashe del US Open tenía un precio de 30 dólares, mientras que las localidades más caras excedían los 1.000 dólares.

Por su parte, las entradas para el Louis Armstrong Stadium, un recinto inaugurado en 2018 y con capacidad para 14.053 espectadores, poseen un precio entre 30 y 400 dólares. En este recinto solo se juegan partidos durante la primera semana, aunque por su pista pasan algunas de las raquetas más destacadas de la competición. Finalmente, las butacas en Grandstand poseen un costo de entre 90 dólares a algo más de 400 dólares.

Evidentemente, el partido que todo el mundo quiere ver es la gran final. Como decíamos, las cantidades pueden variar ligeramente, sin embargo, a la hora de cerrar estas líneas, el precio de las entradas para ver la final masculina del US Open oscilan entre 661,72 dólares las más baratas y 11.648,84 dólares las más caras.

Por su parte, la final femenina, que se disputa el sábado 9 de septiembre, posee un precio que oscila desde los 243 dólares las butacas más económicas a los 8.155 dólares de las localidades más exclusivas.

Decíamos que el Grand Slam es un torneo especial por su público. Por lo ruidoso, pero también porque es muy numeroso. El estado Arthur Ashe, la pista principal del US Open, posee una capacidad de 23.771 espectadores. De hecho, se trata del recinto cuyo único exclusivo es el tenis más grande del mundo. Un pabellón que además cuenta con cubierta retráctil para permitir disputar los partidos cuando las condiciones climatológicas no sean óptimas.