Alcaraz lanza un dardo a Inglaterra delante de todo el público de Wimbledon: "El domingo será un gran día para los españoles"

Londres.- Carlos Alcaraz es el ídolo de la pista central de Wimbledon. En esa grada se celebran sus aciertos y se lamentan sus fallos, hay un runrún importante cuando empieza a subir el nivel y a abrasar al rival. Le quieren por su espectacular tenis, por una sonrisa perpetua y un derroche de carisma casi inigualable. Tampoco le va mal que el tenis ande carente de ídolos locales. No hay británicos ni cerca de este nivel, así que en la grada no tienen que elegir entre el español y el terruño.

Quizá por eso incluso cuando les mete un poco los dedos en los ojos son capaces de reaccionar con humor. Al finalizar el partido le tocó hacer en la pista las declaraciones rápidas, las típicas de los partidos grandes, y muy pronto dijo una frase que había nacido para disgustar a esa grada. "El domingo será un gran día para los españoles, como bien sabéis por la Euro", dice antes de soltar una sonrisa. Y ahí, claro, llegaron los abucheos. Mientras la entrevistadora reía, eso sí.

Unos abucheos especiales, casi amistosos. Le abuchean porque además de hablar de sí mismo está hablando de la Selección española y del mismo modo que con él pueden dar rienda suelta a su cariño, con el equipo de Luis de la Fuente no va a colar. España se enfrentará a Inglaterra, que sigue sin sacar tenistas de este nivel pero ya sí tiene un equipo nacional capaz de llegar a finales de Eurocopa. Y eso hace que puedan ir con Alcaraz, pero en el fútbol, enemigos.

"No he dicho que vayamos a ganar, solo digo que será un día muy divertido", explica Alcaraz en la siguiente frase, con bastante gracia. Hasta en esto hay buenas vibraciones, la gente ha aceptado que su comentario es inocuo, que el chico que se ha pasado un buen rato haciéndoles felices tiene que ir con España, pero en la central de Wimbledon el domingo, sin importar quién esté delante, será él quien tenga detrás el aliento del público. Y si el domingo gana y vuelve a desear suerte al equipo de fútbol, volverá a ser abucheado. No lo dice la ley, pero casi.

Tampoco se podía esperar algo distinto. Alcaraz ha demostrado estos quince días que no solo está enchufado en su torneo, sino también muy preocupado por lo que va pasando en Alemania. Del mismo modo, esta grada no podía dejar pasar sin más un comentario así. En todo caso, Alcaraz tiene razón, el domingo va a ser un día importante.