Davidovich desahoga su angustia tras ser señalado por su decisión fatídica en Wimbledon: "Estaba temblando"

Londres.- "Lo voy a decir en andaluz: 'Me he cagao' en los pantalones, estaba temblando, no quería jugar ese punto y he hecho lo primero que me ha venido", fueron las primeras palabras de Alejandro Davidovich tras caer eliminado en el supertiebreak de la 3ª ronda de Wimbledon ante Holger Rune. Se refiere a uno de los últimos puntos, donde con 8-6 en el marcador [hay que llegar a 10 para ganar], decidió hacer un saque de cuchara que ha captado el danés, ganando el punto sin problemas. Con esa minirotura de servicio, el número 6 del mundo acaba dando la vuelta al marcador y llevándose la victoria dando por terminado el sueño del español.

Hacer una locura en un punto clave puede ser una inconsciencia, un error garrafal o una genialidad si sale bien, pero lo que parece claro es que lo ocurrido es el último episodio de nervios e indecisión de un jugador al que se le viene todo encima en los grandes momentos, los peores para no ser capaz de guardar la calma: "Estoy muy tenso, no se puede explicar con palabras lo que siento en esos momentos de alta tensión".

Este sábado, ha decidido hacer un saque 'por abajo', pero en otras ocasiones los nervios le jugaron, incluso, peores pasadas. Sin ir más lejos, en Wimbledon 2022, cayó eliminado tras recibir un punto de sanción al lanzar una pelota a la grada en un punto de partido en contra ante Hurkacz, también en un supertiebreak. Él había desaprovechado tres opciones de ganar antes y la sensación del precipicio también le superó. Algo parecido ocurrió en el Challenger de Barcelona en 2019, cuando decidió lanzar dos saques fuera de la pista por tener el tie break decisivo perdido con 6-0.

Cerrar los partidos es de las cosas más complicadas en el tenis, pero Davidovich tiene demasiadas 'patinazos' en su carrera donde se le escaparon verdaderas ocasiones de oro. Por ejemplo, este año en el ATP de Dubai, tuvo cinco pelotas de partido ante un Top 10 como Rublev y las perdió todas. Otra de las más recordadas sucedió en Colonia, en 2020, cuando terminó perdiendo un encuentro que dominaba por 6-2 y 5-2 con saque ante el argentino Schwartzmann.

Aunque no sepa explicar lo que le pasa por la cabeza en esos momentos, el primer paso debe ser darse cuenta del error y eso lo tiene asumido: "Tienes que aceptar cuando la has cagado, se lo he dicho a mi equipo y es una experiencia más que me llevo para gestionar esos momentos de alta tensión".

En ese equipo, llevan tiempo trabajando junto a un psicólogo para encontrar cómo mejorar estas situaciones "Estamos en ese proceso. Lo que me falla a mí es ser constante y es lo que estamos buscando, dar ese paso más".

En pocos minutos, el saque y el error se han hecho virales en las redes sociales con duras críticas o cachondeo entre los usuarios. "No tengo redes", responde el malagueño a la pregunta de Relevo: "Me he cerrado las cuentas por bienestar mental. Se pasan muchas horas en redes sociales que se puede utilizar para leer o hacer cosas más eficientes".

No son pocos los tenistas que han tomado esta decisión por la cantidad de mensajes que reciben — la mayoría de apostantes en casas de apuestas — tras duras derrotas como esta. "Si la gente fuera un inteligente, sabría que no he perdido el partido por ese golpe", analiza, mientras recuerda que también ha tenido "dos bolas de partido a favor unos minutos antes con un 15-40 al resto" para restar importancia a los comentarios sobre su polémico saque.