WIMBLEDON

El enigma imposible que sufren los rivales de Alcaraz: "Él dicta cómo se va a jugar"

Rivales y entrenadores buscan un modo para atacar al jugador español, pero asumen que es probable que no exista.

Carlos Alcaraz sube a la red./EFE
Carlos Alcaraz sube a la red. EFE
Gonzalo Cabeza

Gonzalo Cabeza

Londres.- Jeremy Chardy se enfrentó hace unos días al mayor desafío del tenis actual. Ugo Humbert, jugador al que entrena, había pasado las tres primeras rondas de Wimbledon y el cuadro indicaba que tenía que enfrentarse a Alcaraz. Tocaba trazar un plan de partido, tratar de decirle al chico cuál era el sistema que le iba a poder llevar a la siguiente ronda. Y no valía pedirle solo que se dedicase a rezar.

"Yo le dije que era importante que no le dejase jugar, que fuese muy agresivo y buscase pegarle a la pelota pronto, buscar la manera de presionarle. Ese era nuestro objetivo", explica el exjugador francés a Relevo.

Chardy era consciente de que ningún consejo iba a sobrar, pero también de que lo más probable es que no existiese táctica posible para echar a Alcaraz. El intento fue bueno, le ganó un set e incluso logró confundirle durante un rato, pero insuficiente. El español, de hecho, ya está en semifinales tras ganar también a Tommy Paul.

Resumen Alcaraz ante Tommy Pual. Reuters

"Es un jugador increíble, defiende, ataca, es capaz de hacer dejadas... es capaz de hacer todo", explica a modo definición de un jugador que no parece tener carencias. De sus manos puede salir cualquier tipo de tenis y eso en sí mismo complica sobremanera cualquier intento de neutralizarle. No solo es buenísimo, es casi agotador, sale a la pista con mucho ganado porque sus rivales son conscientes de que ni siquiera desplegar su mejor versión les asegura nada.

"Puede cambiar muchas cosas durante un partido hasta encontrar la solución para ganar. Además, juega muy bien los momentos importantes, al final fue demasiado para Ugo", reflexiona Chardy. Recordemos que Humbert es cinco años mayor que Alcaraz, pero eso en el caso del español no parece importar en absoluto.

"Es un jugador con mucha confianza, no importa que tenga 21 años, tiene ya mucha experiencia ganando torneos grandes. Es el campeón, y el campeón siempre encuentra su mejor momento cuando toca. Demostró en ese partido que incluso en las dificultades siempre encuentra una manera. Lo hacía Sampras, lo hacía Federer. Es lo mismo con Novak y ahora también con Carlos", añade el francés.

La pregunta cae casi sola ¿es ese tipo de campeón? "Sí, sin duda, desde que llegó al circuito vimos que era muy especial", responde rotundo. Chardy, por si todo este elogio fuese poco, lo remata sin ser preguntado siquiera con un elogio más, otro que se extiende inexorablemente allá por donde pasa: "Además es un chico encantador, muy humilde. En este momento es el jugador que más me gusta por todo lo que hace por el juego. Me encanta como persona y como jugador, estoy muy feliz de que alguien como él esté en lo alto del juego. Él es bueno para el tenis". Ahí es nada.

En la historia del tenis lo normal es que haya una manera de jugar al que tienes enfrente. Siempre hay una pequeña grieta y un buen entrenador es capaz de encontrarla. ¿Siempre? No, parece que, de repente, ya no, hay una excepción a la norma que es Carlos Alcaraz y nadie tiene muy claro si hay un modelo posible.

"Es difícil. Cuando vamos con un jugador tan completo es difícil. A ver, Carlos lo bueno que tiene, más allá de su variedad, es que tiene respuesta para casi todo, el 99% de los partidos dependen de él, de cómo esté él, porque él es el que dicta cómo se va a jugar", explica Feliciano López.

Alcaraz abraza en la red a Tommy Paul REUTERS
Alcaraz abraza en la red a Tommy Paul REUTERS

La pregunta sin respuesta

Se le hace la misma pregunta que a Chardy "¿cómo lo harías tú?" La respuesta es sincera, de igual manera que Alcaraz parece como un golfista que tiene todos los palos, uno para cada situación, Feliciano era un jugador mucho más concreto.

"Yo siempre intentaba hacer daño a los rivales con un juego agresivo, atacar, atacar, subir a la red. Yo no tenía que pensar tanto porque era un poco la manera en la que jugaba casi siempre. Contra Carlos estás siempre en sus manos, tienes que esperar que tenga un mal día, que esté un poco más errático y esperar la oportunidad", explica.

Juan Manuel Esparcia, entrenador, también optaría por un plan agresivo. Aunque solo sea por quedarse con la sensación de, por lo menos, haberlo intentado: "Cuando él no tiene la iniciativa es cuando peor lo pasa, cuando tiene la iniciativa es el mejor. Necesitas que tu jugador esté suelto, que esté tranquilo y que pueda desarrollar su tenis independientemente de lo que ocurra, que se atreva a hacer cosas, sacarlo de su zona de confort".

Necesitas muchas cosas. Es casi una cuestión de fe, intentar que todo te salga bien, que a él todo lo salga mal, que... demasiados condicionantes.

A Roberto Bautista le preguntaron tras su derrota contra Paul cómo podría jugarle a Alcaraz. Su respuesta fue la de todos, los rivales, los amigos, los cercanos y los lejanos: no hay una solución clara.

El final de todo esto es que Alcaraz comienza a darse cuenta también él. No le sorprende que el resto de jugadores no tengan un plan de partido. Es un monumento a su extrema superioridad, pero no se puede tomar por un exceso de vanidad o ego, lo que ve Alcaraz es lo que ven todos.

"Voy a decir que la mayor parte de los partidos sí que depende de mí y creo que eso es bastante bueno, si encuentro mi mejor juego y la manera de dominar el partido tanto para bien, como para mal, van a depender de mí. Intentamos poner nuestro juego en cada partido, mis buenos golpes para poner al otro en problemas. Siento que sí, que depende de mí".