WIMBLEDON

La indolencia que delata a Djokovic y despista hasta a Kyrgios: "Nunca le he visto tan confundido"

Sin títulos y arrasado por Alcaraz y Sinner en este 2024, Djokovic camina sobre el alambre. "¿Tiene suficiente energía para ganar otro Grand Slam?", se pregunta Nick Kyrgios.

Djokovic se lamenta durante la final de Wimbledon ante Alcaraz. /EFE
Djokovic se lamenta durante la final de Wimbledon ante Alcaraz. EFE
Nacho Encabo

Nacho Encabo

El calendario indica que ya se ha superado el ecuador de 2024 y las estadísticas dicen que Novak Djokovic todavía no ha celebrado un título en lo que va de año. Algo extraño, extrañísimo. Tanto, que hay que retroceder a 2006 para ver la última vez que Nole estaba sin títulos a la conclusión de Wimbledon. Sumen a eso que el serbio tiene 37 años, que se ha operado el menisco hace un mes y medio y que la nueva generación, con Carlos Alcaraz y Jannik Sinner a la cabeza, se le está subiendo a las barbas.

El 6-2, 6-2 y 7-6 (7-5) sufrido ante Alcaraz el domingo en la catedral del tenis puede ser el paso definitivo del testigo. El mejor tenista de todos los tiempos claudicando y sufriendo ante el líder de la nueva generación. "Ha sido una aniquilación", llegó a decir el domingo por la tarde el extenista Tim Henman durante la retransmisión de la BBC.

"Me he sentido inferior en todo momento y ha sido mejor que yo en todos los aspectos del juego. Intenté remontar, salvé incluso tres match points y alargué el partido un poco. Pero su victoria era inevitable", comentó Djokovic, campeón de 24 Grand Slam, en la sala de prensa del All England Club.

Hay que bucear bien en los recuerdos para ver a Djokovic tan a merced de un rival en una final de Grand Slam. Quizás las más parecidas sean la de Roland Garros 2020 (6-0, 6-2 y 7-5 contra Rafael Nadal) y US Open 2021 (6-4, 6-4 y 6-4 con Daniil Medvedev), pero la situación general de Djokovic era radicalmente diferente en ambos casos: en 2020 había ganado cuatro títulos y en 2021 venía de ganar Australia, Roland Garros y Wimbledon.

Ahora el palmarés de Djokovic está huérfano en este 2024 y hay algunas derrotas sonrojantes. Varios desconocidos para el gran público como Luca Nardi, Alejandro Tabilo o Tomas Machac le han mandado a casa, aunque las derrotas que más duelen son ante los que le han quitado del trono: la de Sinner en las semis de Australia y la de Alcaraz en la final de Wimbledon.

Kyrgios: «Me hubiera gustado verle romper una raqueta»

Durante gran parte del partido del domingo, Djokovic no parecía Djokovic. Estaba cabizbajo, ausente, como si la final de Wimbledon no fuera con él. Incluso después de perder el segundo set ni siquiera se fue al baño, ni siquiera trató de enfriar el partido y llevarlo por otro camino. No lo ensució, como muchas veces hace cuando se ve contra las cuerdas.

"He tenido muchas experiencias a lo largo de mi carrera. Y, ante la adversidad, normalmente me levanto, aprendo y me hago más fuerte. Eso es lo que voy a hacer"

Novak Djokovic

"Después de que perdiera los dos primeros sets me hubiera gustado verle romper una raqueta, rugiendo o algo así. Tenía que haber estallado un poco para recuperar su energía", analizó Nick Kyrgios, que perdió precisamente ante Djokovic la final de Wimbledon 2022, durante la retransmisión de la BBC. "Estuvo muy apagado durante mucho tiempo. Luego hubo un juego, con 3-2 en el tercer set, en el que recobró la vida, pero ya era un poco tarde. Fue cuando volvió a su estilo de juego habitual, atacando el saque de Alcaraz desde la línea de fondo".

Kyrgios se mostró también sorprendido por la táctica de saque y volea que usó Djokovic durante prácticamente todo el partido. Es cierto que el balcánico domina casi todos los registros del juego, pero justamente el saque y volea no está dentro de su repertorio habitual. "Su táctica de saque y volea me resultó extraña. Nunca había visto a Novak tan confundido en una fase tan crucial de un torneo".

"Djokovic no tenía por qué jugar este torneo. No estaba al 100%, pero decidió jugarlo. Alcaraz simplemente fue demasiado para él. Los passings shots que le hizo con la derecha y su ejecución de los golpes fue simplemente increíble", añadió Kyrgios en su nuevo rol de comentarista antes de soltar la pregunta que se hacen muchos en este momento. "¿Tiene Djokovic suficiente energía para conseguir otro Grand Slam?"

Para empezar a responder a esa pregunta habrá que esperar un par de meses para el US Open. Pero antes hay otra cita que le quitará el sueño a Djokovic: los Juegos Olímpicos de París (del 26 de julio al 11 de agosto). "Vamos a ver cómo me siento física y mentalmente. Ojalá pueda encontrar el tenis adecuado porque voy a necesitar todo lo que tengo y más para llegar a la final de los Juegos. Hoy he visto que estaba medio paso detrás de Carlos en todos los sentidos. Siento que no estoy ni a su nivel ni al de Jannik", dijo Nole el domingo en Londres.

"Voy a trabajar en ello. No es algo que sea nuevo para mí. He tenido muchas experiencias a lo largo de mi carrera. Y, ante la adversidad, normalmente me levanto, aprendo y me hago más fuerte. Eso es lo que voy a hacer", prometió.