Vondrousova, nueva campeona de Wimbledon ganando el primer Grand Slam de su carrera por sorpresa

Londres.- Ons Jabeur era la preferida del público, que la intentó aupar desde que saltó a la pista para conseguir ser la primera africana campeona de Grand Slam. La tunecina, número 6 del ranking mundial, era la favorita ante la checa Marketa Vondrousova, que llegaba a Wimbledon fuera de las cabezas de serie y abandonada por su marca deportiva a principios de año. Las gradas terminaron ovacionando a Jabeur, pero en su valle de lágrimas, porque terminó cayendo con un 6-4 y 6-4.

Y, para alegría del público, Ons empezó bien. Con ritmo y haciendo daño con su derecha. Todo iba según lo encaminado, con 4-2 en el marcador, hasta que llegó el colapso. Después de caer en la final del año pasado ante Rybakina, Jabeur se veía en la obligación de no dejar escapar otra posibilidad para hacerse con el primer 'grande' en su palmarés. Pero, en muchas ocasiones, las obligaciones solo traen malas experiencias y atenaza a cualquier. El mejor ejemplo es lo ocurrido en un primer set en el que, con el paso de cada bola, la checa crecía mientras su rival desaparecía.

Tanto fue así que la magrebí no volvió a ganar un solo juego en ese primer set y el resultado pasó del 2-4 al 6-4 para Vondrousova. Primer paso hecho para cerrar su título sorpresa.

La resurrección era más cuestión de fe que de nivel de juego. Superada en todos los aspectos del juego, parecía imposible que ganara un punto por su solvencia. Llegó la rotura en su primer saque del segundo set y algunos empezaban a recoger sus atuendos en la grada. Fue entonces cuando la Central Court decidió levantar a Jabeur de la lona. Un grito unánime mientras se cruzaba la pista por el lado contrario de los banquillos.

A partir de ahí, llegó una confianza desaparecida y un cambio de chip fuera de lo normal. Del 0-1 con break al 3-1 a favor. Su derecha empezó a fluir, quizás porque había perdido toda la presión en un partido que tenía 'perdido'. Se levantaba, como ya pasó con Svitolina en el partido de semifinales, para no abandonar su sueño: desde hace dos años, Ons tiene el trofeo de ganadora de Wimbledon como fondo de pantalla.

Su reacción fue frenada con un contrabreak de Vondrousova que igualó a tres el parcial, aunque la final parecía haber cambiado y la tunecina estaba en el partido. La checa, si quería ganar, tendría que sacar su mejor versión. Lo hizo justo cuando debía y la peor cara de la Jabeur de unos juegos antes volvió a aparecer. Rotura clave en el 4-4 y sacar para ganar ante el enfado de un público que quería más.

Vondrousova, que ya perdió la final de Roland Garros en 2019 ante Barty, quiso y pudo cerrar el partido para no repetir la mala sensación. La sensación de caer en la hierba de la pista central de Wimbledon como la nueva campeona y sumando su primer Grand Slam a su palmarés.

La tenista checa llegaba como número 42 del ranking mundial de la WTA, solo con la final había escalado hasta el puesto 16 y su victoria final la mete en el TOP10. Una gesta deportiva.