VELA

Papá Noel llega a la Vendée con otro récord en Cabo de Hornos

Richomme rebaja en más de tres días el récord de Le Cleach' de 2016 al doblar Hornos en 43 días y 11 horas desde la salida.

Romain Atanasio se disfraza de Papá Noel en pleno Pacífico Sur. /VENDÉE GLOBE
Romain Atanasio se disfraza de Papá Noel en pleno Pacífico Sur. VENDÉE GLOBE
Nacho Gómez

Nacho Gómez

Los 36 navegantes que siguen compitiendo en la Vendée Globe, la vuelta al mundo en solitario y sin escalas, representan la antítesis de las fiestas familiares con las que celebramos la Navidad. Solos a bordo de su velero, en pleno océano y con los humanos más cercanos a cientos de millas, la Navidad para ellos es una excusa para ponerse el disfraz que traían en bodega, sacarse la foto y seguir devorando millas.

De hecho, la velocidad a la que están compitiendo en esta décima edición de la Vendée ya es la más rápida de la historia. Papá Noel ha aterrizado en la flota justo cuando los líderes han alcanzado uno de los puntos más míticos de la ruta: Cabo de Hornos. Y lo ha hecho con un excelente regalo en el zurrón, ya que el primer clasificado, Yoann Richomme ha destrozado el récord de la vuelta al mundo en ese punto.

En 2016, Armand Le Cleach' dobló Cabo de Hornos en 47 días y 34 minutos para después fijar el récord de la vuelta al mundo que sigue vigente, ya que regresó a Les Sables D'Olonne en 74 días. Pues bien; Richomme ha invertido solo 43 días y 11 horas, rebajando en más de tres días el tiempo de paso por Cabo de Hornos, lo que le deja en una situación maravillosa para batir el récord de la vuelta completa.

Las condiciones de viento en la subida del Atlántico, la pericia de Richomme y el excelente rendimiento de los nuevos IMOCA decidirán el futuro del récord, pero hay otro elemento que favorece la posibilidad de batirlo: la enorme igualdad que hay en la cabeza de la flota. Richomme dobló Cabo de Hornos con solo nueve minutos de ventaja sobre el segundo clasificado, Charlie Dalin, en una batalla que puede ser histórica.

El tercer clasificado, Seb Simon, ha doblado Hornos con una desventaja de un día y. nueve horas sobre la pareja de cabeza, una diferencia que es totalmente recuperable teniendo en cuenta que aún les quedan más de 6.000 millas para la conclusión de la vuelta al mundo. El cuarto clasificado, Thomas Ruyant, ya navega a unas 1.500 millas de la cabeza, con lo que tiene la victoria ya casi imposible.