Cuántos sets tiene un partido de voleibol

El voleibol es un deporte peculiar, nacido de la inspiración de dos deportes a priori muy distintos entre sí como son el baloncesto y el bádminton. La idea era encontrar un deporte de pelota que rehuyese el contacto, por lo que parte de sus usos y hábitos están directamente cogidos de las disciplinas de raqueta. Además de la red que divide el campo, el más notorio es la estructuración del partido en sets. Un asunto que hace que la duración de un encuentro sea variable.

A lo largo del tiempo, el reglamento del voleibol ha ido variando para hacerlo un espectáculo cada vez más atractivo para el público. Una de las modificaciones más importantes fue la de eliminar la necesidad de recuperar el saque antes de puntuar, lo que hacía que los choques se eternizasen. Sobre todo, porque de manera similar a lo que sucede en el tenis, un equipo debe superar en dos puntos al rival para poder adjudicarse el set.

Los partidos de voleibol se juegan al mejor de cinco sets. Esto es, el equipo que consigue ganar tres mangas se lleva la victoria. Así lo establece el reglamento de la Federación Internacional de Voleibol en su artículo 6.3. Para ganar un set es necesario alcanzar 25 puntos, siempre y cuando se tenga una ventaja de dos tantos respecto al rival. Esto es, con 25-24 un equipo no conseguiría la victoria, necesitaría marcar el 26-24 para proclamarse ganador de la manga.

Si bien es cierto que en algunos torneos amateur o de categorías inferiores se pueden establecer partidos al mejor de tres sets, estos son la excepción y no la norma.

El quinto set de un partido de voleibol, también conocido como set de desempate, se disputa en circunstancias especiales respecto al resto de mangas de un partido. Concretamente, para ganar el quinto set un equipo debe conseguir 15 puntos, en lugar de los 25 que se requieren habitualmente. Se mantiene, eso sí, la necesidad de aventajar al rival por dos puntos. Es decir, si el quinto set se empata 14-14, el equipo vencedor deberá lograr un marcador de 16-14 o 17-15 para llevarse el gato al agua.

En los últimos años, el vóley-playa ha ganado popularidad respecto a su hermano mayor debido a la espectacularidad de su juego y, sobre todo, a lo más dinámico de su formato. Una de las principales diferencias es la duración de los encuentros. Concretamente, un partido de vóley-playa se juega al mejor de tres sets, por lo que el ganador es el que vence en dos.

En el caso del voleibol de playa, para ganar un set es necesario ganar 21 puntos, con una ventaja de dos tantos respecto al rival. En el caso de necesitarse una tercera manga de desempate, esta se juega a 15 puntos. Además, el vóley-playa cuenta con la peculiaridad de que cada siete puntos, los equipos deben cambiar de campo (cinco en el tercer set).