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El acuerdo Netflix - WWE y la entrada de The Rock a la directiva de TKO dispara el valor de la empresa

TKO Group Holdings, propietaria de UFC y WWE, anunció dos acuerdos históricos que hicieron crecer sus acciones más de un 15% en Wall Street. Netflix emitirá Raw a razón de 5.000 millones de dólares.

The Rock, acompañado por Vince McMahon, Ari Emanuel (CEO) y el resto de directivos de TKO Group Holdings dieron inicio a la jornada en Wall Street./Reuters
The Rock, acompañado por Vince McMahon, Ari Emanuel (CEO) y el resto de directivos de TKO Group Holdings dieron inicio a la jornada en Wall Street. Reuters
Álvaro Carrera

Álvaro Carrera

Este martes fue el primer gran día de TKO Group Holding desde su constitución en el mes de septiembre. Endeavor, empresa matriz de UFC, adquirió/se fusionó con WWE para crear una megacompañía de deportes de combate. Durante estos meses han trabajado en silencio. Había muchas cosas que rehacer y aunque UFC y WWE siguen trabajando como entes independientes tienen líneas en común. Por el momento no ha habido demasiado feedback entre ambos de manera pública (WWE ayudó a UFC a entrar en Arabia Saudí), se centran en potenciar las marcas por separado.

De este modo, la parte centrada en WWE estaba trabajando en la renovación de los derechos televisivos de sus dos principales programas: Raw y SmackDown. El acuerdo del primero finaliza en diciembre de 2024, por lo que movieron la vía SmackDown de inicio. A los pocos días de la fusión entre empresas, en septiembre, se anunció que la marca azul dejaría Fox y regresaría al canal USA Network, donde se está emitiendo Raw. La marca roja es la gran estrella del negocio, ya que es tendencia en redes sociales cada lunes del año. Había muchas ofertas y este martes hicieron oficial la mejor. Raw se va a Netflix a partir de enero de 2025.

La plataforma de streaming se hace con los derechos del programa rojo durante diez años a razón de 5.000 millones de dólares. Raw garantiza éxito. Casi 20 millones de espectadores únicos veían en USA Network el programa cada año. El acuerdo, del que todavía no se conocen demasiados detalles, va un paso más allá de lo que se pueda pensar. Netflix ofrecerá Raw en Estados Unidos, pero en Canadá, Reino Unido y Latinoamérica también emitirá SmackDown, NXT, los Premium Live Events así como contenido exclusivo que habitualmente está disponible en WWE Network.

Las series y documentales se podrán consumir en todos los países en los que está Netflix y se prevé, según el comunicado de ambas partes, que puedan sumarme más países al paquete completo. Un ejemplo perfecto sería, por ejemplo, España, donde ninguna televisión o plataforma emite WWE. La única manera legal de hacerlo es a través de WWE Network. Con este acuerdo, Raw abandonará por primera vez desde su creación (1993) la televisión convencional en Estados Unidos.

La noticia, por la dimensión, paralizó todo... o no. Y es que los aficionados a la lucha libre ya estaban en shock desde unos minutos antes. A primera hora de la mañana en la Costa Este de Estados Unidos, TKO Group Holding envió un comunicado de prensa con un golpe de efecto todavía mayor. Dwayne Johnson, conocido como The Rock, pasa a formar parte de la Junta Directiva de TKO. El luchador, actor y empresario pasará a tener una parte importante en la empresa para aportar "su experiencia", según apuntó el comunicado.

La información se publicó pronto porque el propio The Rock acudió a Wall Street para iniciar el día bursátil, un día en el que TKO Group Holding voló. Sus acciones acabaron la jornada del martes creciendo un 17%. Ambos acuerdos hacen crecer el valor de WWE por un lado y el respaldo a TKO por otro. Unidas son la tormenta perfecta. Todavía no se explicó al detalle la función de The Rock, aunque será imagen pública de TKO y el luchador recibe los derechos de explotación de su nombre. Un win-win para ambas partes en toda regla de inicio.

Su presencia en Wall Street provocó que también acudiese a varios programas y en ellos dejó caer la última bomba del día. WrestleMania 40 (6 y 7 de abril) es el evento en el que todos sueñan con un combate entre The Rock y Roman Reigns, rostro de la compañía y primo del luchador, para cerrar una etapa. Johnson alabó el trabajo de su familiar, pero las filtraciones ya apuntan a que querría estar en ese evento. Hace unos meses, The Rock aseguró que "sólo volvería a WWE si había una buena historia detrás". Su carrera en Hollywood no para de crecer y como empresario también le va bien, por lo que persigue en este momento cosas que le motiven. No se conocen planes creativos, pero con su nuevo puesto de mando en la empresa propietaria de WWE seguro que tiene mas fácil encontrar una oportunidad que le guste para volver a subirse al ring.