El gran reto de España... con dos años de retraso
Las de Miguel Méndez no sólo se juegan volver a unas semifinales tras cuatro años, también arriesgan la plaza olímpica.

España lleva ya varios días en Liubliana, preparando un partido que lleva en la recámara de la Selección dos años. El tiempo que ha pasado desde que Francia se cruzó en el camino del equipo nacional en los Juegos de Tokio. Fue la última vez que se disputaron unos cuartos de final y la moneda salió cruz. El mismo signo que salió dos meses antes ante Serbia en el cruce del Eurobasket celebrado en Valencia.
Dos años sin catar semifinales es demasiado tiempo para un equipo que en la última década se ha acostumbrado a ganar, ganar y volver a ganar. Por eso, el encuentro ante Alemania tiene mucha carga emocional y un doble premio al que no puede renunciar en este camino de vuelta a la élite. Una oportunidad que no puede perder si quiere dar sentido al proceso de reconstrucción que comenzó con el cambio de banquillo.
Alemania es el escollo para que España se quite el mal sabor de boca y cumpla con su doble objetivo. El primero: meterse en las semifinales y en la definitiva lucha por las medallas de este Eurobasket 2023. Y el segundo: asegurar una plaza en el torneo de clasificación para los Juegos Olímpicos de París, que se disputará el próximo mes de febrero.
"Las 12 tenemos muchísimas ganas de este partido de estos cuartos de final, sabemos que es un partido clave en el campeonato que te lleva a la lucha por las medallas, sabemos de la importancia que se vive y lo que queremos hacer. Los últimos dos cuartos de final que tuvimos salió cruz y tenemos muchas ganas de que esta vez sea cara, pondremos todo lo que tengamos, todas queremos sacar esto adelante, es un partido de nervios, a veces no es el mejor baloncesto, de finales apretados, pero es el partido que quieres ganar", aseguró Silvia Domínguez en la previa del choque.
España, la tercera mejor defensa del campeonato y el cuarto mejor ataque, ha contado con un día más de descanso, lo que en teoría debe ser un factor positivo para la recuperación física a pesar del desplazamiento desde Tel Aviv, que las alemanas se han ahorrado.
"Llevamos treinta días de preparación, llevamos una liga y una Euroliga y Eurocup dura que nuestras jugadoras llevan en las piernas pero esto es desde el principio de la preparación, intentamos llevarlo lo mejor posible, tenemos posiciones con jugadoras que están más exigidas pero creo que a todos los equipos les pase igual", concluye el seleccionador Miguel Méndez horas antes del mayor reto de España desde 2021. Un desafío que puede acabar con el equipo nacional en un podio que no pisa desde hace cuatro años. Demasiados para este equipo.