Georgios Bartzokas, un guitarrista frustrado con vida de película que se interpone en el camino del Madrid
El técnico heleno, cuyo padre inspiró 'La Gran Evasión', es el último escollo para el equipo blanco.
![Georgios Bartzokas saluda a Vezenkov tras la victoria ante el Monaco./Efe](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202305/20/media/cortadas/georgios-bartzokas-vezenkov-RoC1kkzbRW72llBPKdRVqFL-1200x648@Relevo.jpg)
Kaunas.-Georgios Bartzokas, técnico de Olympiacos, es un superviviente nato. Un genio de la pizarra que ha conseguido consagrarse en la élite europea a pesar de todos los obstáculos que se ha encontrado por el camino. Dificultades en forma de tropiezos deportivos como el que vivió en su primera etapa en el Olympiacos o en Barcelona que, sin embargo, le han hecho aprender y no perder de vista el final del túnel. O en su caso, el final de la escapada.
El técnico heleno aprendió ese espíritu de supervivencia de su padre Andreas, que se convirtió en ejemplo para su hijo con una vida de película. Y en su caso esta expresión es literal. El padre de Georgios perteneció al Partido Comunista y fue capturado como prisionero de guerra en el conflicto civil que golpeó al país heleno en los años 50. Andreas entró en prisión y allí protagonizó una fuga que serviría como inspiración para una de las películas más famosas de la historia.
Junto a otros 27 presos más Bartzokas construyó un túnel que iba desde su habitación hasta el otro lado de los muros de la prisión de Vourlas. Una vía de escape que pasó desapercibida para sus captores y que terminó con la fuga el 17 de julio de 1955 que sirvió como referencia para 'La gran evasión', la famosa cinta protagonizada por Steve McQueen.
![Cartel de la película 'La gran evasión'. MGM](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202305/20/media/cortadas/evasion-U10765088024KqG-406x720@Relevo.jpg?cw=300&ch=533)
No es el único vínculo de este estratega con el mundo del espectáculo. Bartzokas, que llegó a ser profesional en las filas del Maroussi hasta que una lesión de rodilla le retiró, soñaba con ser estrella en otras tablas. Concretamente en las de un escenario y con una guitarra colgada del hombro. Así lo confesó en una entrevista reciente con DAZN. "Me gustaba mucho la música cuando era joven", aseguraba el técnico griego. "Quería tocar la guitarra como Jimmy Page en Led Zeppelin. Ese era mi sueño. Si tuviera la oportunidad de hacer algo diferente sería esto".
Del amor al odio en Atenas
Por suerte para el baloncesto los dedos de Bartzokas agarraron un rotulador para diseñar jugadas en una pizarra y se olvidaron de las seis cuerdas. Tras retirarse como jugador empezó una carrera como entrenador en la que ha vivido la cara más amable, como fue el convertirse en el primer técnico griego en conquistar una Euroliga en 2013.
Pero también ha vivido el lado más amargo. Y sólo un año después de tocar el cielo, cuando se convirtió en el objeto de las iras de los fans de Olympiacos por un contrato inacabado con Fenerbahce. Hoy esa 'traición' está olvidada y Bartzokas vuelve a ser el ídolo de una afición encomendada a sus conocimientos para volver a reinar en Europa.
No sólo los fans de El Pireo están entregados a este entrenador que no triunfó en el Barcelona. También sus jugadores confían ciegamente en él para rematar una temporada en la que han sido los mejores de Europa a falta del título. "De él esperamos que sea el mejor entrenador que puede ser. Él te pone en la posición ideal para poder tener estos éxitos. Sin él no sabríamos qué sistemas de ataque aplicar o cómo manejar un partido. Todo el cuerpo técnico ha hecho un trabajo espectacular todo el año", aseguraba Alec Peters en conversación con Relevo horas antes de la gran final.
"Sin él no sabríamos qué sistemas de ataque aplicar o cómo manejar un partido. Todo el cuerpo técnico ha hecho un trabajo espectacular todo el año"
Jugador de OlympiacosEl entrenador del año en la Euroliga es ahora el último escollo de un Real Madrid al que se ha rendido en la previa. "Están aquí a pesar de las grandes ausencias, ganaron al Partizán y ayer al Barça, han demostrado las posibilidades que tienen y su talento. Ya sabemos que en una final, no hay nada fácil", aseguraba un Bartzokas, que señaló las claves de un encuentro del que no quiere huir. "Controlar las emociones, porque el baloncesto es un deporte que tiene muchos altibajos, una montaña rusa de emociones".