Djokovic se salta una regla sagrada de Wimbledon: "Sé que no es lo ideal, me gusta respetar las normas"

Londres.- Djokovic no solo ha podido jugar en Wimbledon, algo sobre lo que hubo durante semanas una duda razonable, sino que cuando entró en la pista central demostró que ha venido aquí para competir. Vit Kopriva perdió en tres sets nada ajustados (6-1, 6-2 y 6-2).

"No sabía cómo me iba a responder la rodilla, pero estoy muy muy feliz con cómo me siento, de la manera en la que he jugado y en la que me he movido. Para ser el debut no le puedo pedir más", comentaba el jugador serbio en la rueda de prensa.

El movimiento fue una de las cosas que más sorprendieron de Nole, pues fue capaz de flexionar todo el rato, corrió de lado a lado de la pista y pareció tener en todo momento un control absoluto de la situación. No es fácil, menos todavía sin haber podido jugar torneos preparatorios, pero también es cierto que es un jugador que ha ganado en siete ocasiones este torneo.

Juega el serbio con una protección en su rodilla, una tela que, horror, es gris. Es decir, no cumple la estricta tradición de ir de blanco incólume. Un drama moderado, eso sí, pero que ha formado parte de las conversaciones de estos días. "Pregunté. Estuve con la juez de silla antes de entrar en la pista y me dijo que estaba bien. Y en los días anteriores chequeamos si teníamos permiso. Hemos intentado encontrar una rodillera blanca, créeme. He visto que Frances Tiafoe jugó con una manga negra. Esto era gris, creo que está algo más cerca del blanco. Sé que no es lo ideal, me gustaría ir entero de blanco porque me gusta respetar las normas, pero tenía permiso. Les he dicho que haré lo posible para que en el próximo partido sea blanca", decía el jugador serbio tras el partido.

Djokovic también tuvo unas palabras para Andy Murray porque, por muchos motivos, es una persona importante en su carrera deportiva. Nacieron con una semana de diferencia, aparecieron en el circuito en momentos similares, han estado 20 años compitiendo el uno contra el otro. Eso es mucho, y por más que el tiempo haya dejado claro que Djokovic era el mejor, no deja de ser una de esas relaciones importantes.

"Son noticias muy tristes para el torneo y para el mundo del tenis que haya tenido que retirarse de los individuales de Wimbledon. He escuchado que va a intentar jugar dobles", empezaba el serbio. "Pero espero que tenga una nueva oportunidad el próximo año. Le conozco, lo va a intentar. Siempre ha mostrado una resiliencia increíble a lo largo de su carrera. Es un ganador de varios Grand Slams, una leyenda del juego, número 1 y se va a jugar challengers para mejorar sus rankings en tierra, su superficie menos favorita. Dice mucho de su carácter", explicaba Djokovic.

"Es una enorme inspiración para todos los jugadores, no le ha importado meterse en la pista durante horas cada día. Un increíble profesional, su manera de acercarse al deporte es digna de estudio, sin duda", añadía el número 2 del mundo.

Más todavía: "Su determinación para empujar y buscar sus límites, incluso con una cadera artificial, es algo inspirador y un gran ejemplo para los atletas jóvenes que se quejan de esto o de lo otro", explicaba.

"Él ha dejado una gran marca dentro y fuera de la pista, pero algo me dice que lo va a seguir intentando. Se lo merece, por supuesto, tiene todo el derecho de decidir dónde está su línea de meta. Si sigue no tengo dudas de que la gente estará feliz con ello", finalizó.